El esquema: un toque más visual
Después de realizar una lectura comprensiva del temario a estudiar, subrayar las ideas y conceptos relevantes y redactar el resumen, el siguiente paso es hacer un esquema.
El esquema es un
dibujo del texto que nos facilita su comprensión, repaso y memorización. A través de éste, organizamos la
información de forma ordenada y más visual, siguiendo el resumen que ya hemos realizado con anterioridad.
Las
ventajas
de utilizar esta técnica de estudio son diversas:
- Nos hace el estudio más ameno y permite que pongamos más atención en lo que estamos trabajando.
- Nos obliga a pensar y relacionar las ideas. Un conocimiento mejor estructurado es más fácil de ser comprendido y, por ende, consolidado en nuestra memoria.
- Nos permite discernir lo más fundamental e incluso ordenar las ideas de más a menos relevante, los conceptos de más amplios a detallados, etc.
- Nos facilita la memoria fotográfica al ser más visual y directo que el resumen, por ejemplo.
Existen diferentes
tipos de esquemas (de claves, de números, de flechas, de rayas y puntos, etc.), de manera que podemos escoger el que vaya mejor con nuestra forma de aprender o seleccionar entre las diferentes opciones según el tipo de temario a estudiar. Por ejemplo, no es lo mismo un tema de historia que aprender el funcionamiento y las partes de la célula.
Para elaborar un esquema debemos utilizar todo lo realizado en las técnicas anteriores. De todas formas, la
estructuración general debe tener en cuenta los diferentes niveles:
- Nivel 1: Título del texto
- Nivel 2: Ideas principales de cada párrafo
- Nivel 3: Ideas importantes subrayadas en cada párrafo
- Nivel 4: Otras ideas secundarias o menos importantes

Por último, como vimos con el resumen, no debemos olvidarnos de hacer el esquema de manera clara y limpia, con una buena presentación que nos facilite el estudio. Además, debemos conservarlo en un lugar adecuado, pues seguro que en un futuro no muy lejano nos irá de fábula para repasar el temario.









